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NOTICIAS | Régimen de alivio fiscal para la Construcción Federal Argentina y Acceso a la Vivienda

Un decreto del Poder Ejecutivo Nacional se hizo eco de las solicitudes formuladas por parte de los sectores inmobiliarios y de la industria de la construcción, para llevar a cabo la ampliación de la ley de blanqueo de capitales. Detalles de la normativa y la opinión de los principales referentes de las instituciones involucradas.

Los empresarios inmobiliarios y de la construcción, se mostraron conformes con la promulgación de la denominada “Ley de Incentivo a la Construcción Federal Argentina y Acceso a la Vivienda”, la cual ampliará por un año el régimen de blanqueo de capitales destinados a la construcción de unidades habitacionales. Gracias a esta extensión, el gobierno nacional estima recaudar cerca de 5.000 millones de dólres, una cifra sensiblemente superior a los u$s 200 millones contabilizados durante los 120 días iniciales de aplicación del plan, ocurridos durante el año 2021.

A partir de la publicación en el Boletín Oficial, y de la correspondiente reglamentación del Decreto Nº 522/2022, el blanqueo de capitales se extenderá por 90 días, habilitando a los empresarios del sector a abonar, solamente, un 5% del costo de la penalización, a una tasa del 10% pasado ese plazo y por tres meses más; y al 20%, luego, hasta medio año posterior al último vencimiento. Por su parte, la ley establece que todos los interesados quienes accedan a este régimen especial destinado a iniciar o completar proyectos inmobiliarios de tipo privados, se verán exhimidos del pago del impuesto a los Bienes Personales. Independientemente del período elegido para formalizar el blanqueo de capitales, será factible invertir el dinero en cuotas hasta fines del año 2024, contabilizándose un lapso de dos años de inversión. Esta medida permite llevar a cabo una inversión en un proyecto inmobiliario en pozo, abonando en cuotas los valores durante la materialización del emprendimiento.

La medida fue muy celebrada por referentes del ámbito, pues recordemos, la ley promulgada en el año 2021 señalaba que el blanqueo de capitales podría realizarse por única vez.

Para el presidente del Consejo Profesional de Ingeniería Civil (CPIC), Ing. Civil Adrián Comelli, la medida aporta un bienvenido alivio para el sector. “Nuestra industria de la construcción resulta fundamental a los fines de reactivar la actual crítica economía argentina, al crear puestos de trabajo directos e indirectos y millones de valiosos metros cuadrados capaces de revertir los défits habitacionales padecidos. La ampliación del blanqueo de capitales promulgado a través del Decreto Nº 522/2022, se constituye en una útil herramienta para quienes cuenten con dólares no declarados y deseen formalizar una inversión inmobiliaria con vistas a obtener una renta sobre la misma, regularizando al mismo tiempo, su situación con el fisco. La medida llega en un buen momento, puesto que el costo de la construcción en dólares se encuentra entre los más bajos de la historia, sumando alrededor de unos 600 dólares el metro cuadrado en edificios tipificados entre medianeras, en lotes de 8,66 m de frente, una cifra 40% por debajo del promedio de los años 2016 a 2018. Acompañamos esta política y trabajaremos para su adecuada implementación, la cual será muy auspiciosa para nuestro país”, señaló el presidente del CPIC.

Durante la presentación de la medida, acto presidido por el ministro de economía de la nación, Dr. Sergio Massa, el Arq. Damián Tabakman, presidente de la Cámara de Empresarios Desarrolladores Urbanos (CEDU), expresó: “Para crecer, Argentina necesita, urgentemente, motorizar la inversión generadora de trabajo, de modo tal que el impulso a la demanda sea genuino y sostenible en el tiempo. Nuestra actividad inmobiliaria resulta ideal a esos fines, no solo por la potencia que ofrece como industria de industrias, sino también, porque la inversión en inmuebles, desde siempre, ha sido una forma de ahorro a largo plazo de los sectores medios. Hemos protegido el capital de las familias entre generaciones; evitando la salida de divisas, mejorando nuestra calidad de vida y aportando recursos fiscales a los tres niveles del Estado. Más valor, más empleo en Argentina, en el marco de una actividad que conocemos. Valoramos esta iniciativa y tomamos el desafío. A partir de hoy tenemos que trabajar, durante los próximos meses, con intensidad y compromiso, para lograr que la gente se anime a movilizar sus ahorros y los convierta en obras nuevas en nuestro país. Nos ocuparemos de explicar la operatoria y difundirla”, expresó el presidente de la CEDU.

El Ing. Civil Gustavo Llambias, vicepresidente de la Asociación Empresarios de la Vivienda (AEV) y Director Ejecutivo de RED Consulting and Management SA, también se mostró conforme con esta propuesta y señaló a la prensa: “La industria de la construcción tiene uno de los mayores coeficientes de multiplicación de la inversión, según los datos publicados por el Banco Central. Cada peso se multiplica por cuatro. Además, presenta una cadena de valor de más de 50 eslabones. Entonces, motorizar a la industria de la construcción implica mover 140 eslabones, sumando una importante cantidad de mano de obra y transformando a la misma en dólares blanqueados en activos fijos nacionales, los cuales a partir de su efectiva radicación local, comenzarán a pagar impuestos. Deseo destacar el papel de la Mesa de la Vivienda, integrada por los cámaras e instituciones del sector que, de manera conjunta, trabajan para el logro de medidas las cuales beneficien y dinamicen al sector. Una de ellas, era la prórroga de la ley de blanqueo”, afirmó el vicepresidente de la AEV.

Los grandes desarrollos urbanos mejoran la calidad de vida de las personas, y generan al mismo tiempo, un positivo impacto en el crecimiento económico del país. Desarrollar una zona, un barrio o una ciudad introduce significativas mejoras relacionadas al movimiento y circulación de las personas, junto con su consecuente seguridad. Dichos proyectos son responsables de impulsar un continuo efecto multiplicador dentro de las economías locales, incluyendo inversión, empleo, apertura de comercios, optimización en la infraestructura general de los servicios, ingresos y recursos tributarios para los gobiernos. Por ende, todas aquellas medidas virtuosas para nuestra industria de la construcción, supondrá incrementos en la calidad de vida de los habitantes de nuestra nación.