En el año 1984, un hito trascendental marcó la historia de los profesionales técnicos en Argentina con la firma del Decreto 2148/19 por parte del entonces presidente Raúl Ricardo Alfonsín. Dicho decreto, sancionado el 13 de julio de 1984 y publicado en el Boletín Oficial el 23 de julio del mismo año, permitió la incorporación de los técnicos a los consejos profesionales de jurisdicción nacional y de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Al cumplirse 40 años de este significativo avance, desde el Consejo Profesional de Ingeniería Civil (CPIC) celebramos la profesionalización de la actividad en nuestra jurisdicción.
El decreto 2148/19no sólo reconoció la importancia clave de los profesionales técnicos, sino que también estableció un marco de regulación y control capaz de garantizar la calidad e idoneidad en el ejercicio de sus funciones.
La matrícula cumple una función vital: identificar de manera única e irrepetible a cada profesional frente a la sociedad. Esto no sólo brinda seguridad a los/as usuarios/as de los servicios técnicos, sino que también garantiza que cuenten con el conocimiento y las competencias necesarias para ejercer su profesión. Este control institucional del ejercicio profesional es fundamental para mantener los estándares de calidad y confianza demandados por parte de la sociedad.
En este 40 aniversario, reafirmamos nuestro compromiso con la excelencia profesional y la continua mejora de nuestras prácticas.
Recordamos y agradecemos la visión y el liderazgo del presidente Raúl Ricardo Alfonsín, cuyo decreto ha dejado una marca indeleble en nuestra comunidad profesional.
Desde el CPIC, seguiremos adelante con la misma dedicación y profesionalismo, honrando el legado de quienes han trabajado para elevar nuestra profesión y garantizar su reconocimiento en el ámbito nacional.